
Nace en mí una nueva obsesión (o quizás antes la tuve dormida en el alma y ahora está abriendo sus ojos). Tal vez a muchos les parezca estúpida e imposible, pero no me importa.
Isla de Pascua, te amo con vehemente pasión y algún día visitaré tus místicas tierras...
¡Lo juro! ¡Lo prometo!
No hay comentarios:
Publicar un comentario